domingo, 19 de septiembre de 2010

Mambru por la Ciudad de Las Burgas

Parte I. La llegada a Ourense


El viernes recibí una llamada de Juan, Mambrú en ForoMTB. Ya sabía que estaba realizando el Camino de Santiago y que quería verme a su paso por Ourense, más que nada para conocernos personalmente, que de voz, escritura y fotografía ya nos conocíamos perfectamente.

Salió hace unos días desde su pueblo de crianza (Griñón), entre Toledo y Madrid, y pretende llegar a Muxía para, una vez conseguido su objetivo, tomar una bolsa de pipas cara al Atlantico, contemplando un buen cacho el romper de las olas contra las rocas al pie del Santuario da Virxe da Barca. Estampa de Paz y Sosiego y lo digo con conociento de causa. Me estoy viendo reflejado en él cuando, hace ya muchos años, me iba a Cabo Silleiro, al sur de Baiona, a estar un buen cacho contemplando el romper de las olas, cargado no con una bolsa de pipas, pero si con una cámara de fotos reflex de carrete.


La llamada era para anticiparme que estaba en A Gudiña, pensaba llegar el sábado a Ourense despues de meterse casi 100km. y ver cómo tenía mi agenda para encontrarnos. Quedamos en vernos al día siguiente, despues de mis indicaciones sobre el tipo de trazado con tendencia a bajar despues desde Talarino, salvo un repecho en Xunqueira de Ambia. Así despues de todo el día, me llamó sobre las 7:30 de la tarde y nos encontramos 15 minutos más tarde.

Lo reconocí inmediatamente por, además de ser igual que en las fotos más recientes publicadas, ser la única persona que allí estaba en el punto de reunión. Una pequeña queja sobre la explicación que le hice de la bajada, que no llegó a los puños, pero si que lo hizo notar a todos los amigos que llamaron, para mi escarnio.

Partimos hacia el casco antiguo para encontarnos con Julio (el forero Tetaro), junto con otro grupo de bikergrinos. Una vez todos juntos, los otros peregrinos se fueron rápidos a visitar la catedral, mientras Mambru, Tetaro y yo nos fuimos con buen criterio a visitar las excelencias de las cervecerias de la zona. La calle estaba llena de mozalbetes y no tan mozalbetes con camisetas de "Los Suaves", que asistirían a su concierto 3 horas más tarde y al que Tetaro estaba invitado, despues de pagar la entrada para él y su hijo.

Como el hospitalero fue muy estricto, "a las 10:00 cierro las puertas y saco los perros", nos fuimos raudos a cenar los huevos rotos. Vaya!!! Cerrado, que raro? de vacaciones? sin consultar el motivo, me los llevo a otro garito a tomar unos pimientos de Arnoia, tortilla y unas costillinas, regado todo ellos por una buena jarra de cerveza. Hay que recuperar líquidos y tomar el combustible necesario para afrontar al día siguiente otra dura etapa con rampones del 20%, caminos empedrados y corredoiras muy propias de nuestra tierra.

Tetaro declina cenar, solo la cervecita. Asi de este modo, Juan y yo nos pusimos las botas. Y entre llamada y llamada de los amigos, les recomendaba que hablasen más conmigo, así yo con las manos ocupadas con el movil, tendría buena cuenta él de las costillinas.

Entre risas y risas y charleta, se nos echó el tiempo encima, y nos largamos al Albergue, llegando justo a las 22:00, si bien no tenía mucha pinta de cerrarse a cal y canto. Allí estaban varios peregrinos a la puerta, dsifrutando de la noche con buena coversación, y el "cachondo" de Juan me despachó en un plis-plas al entrar en conversación con una alemana.

Al día siguiente domingo quedamos para las 8:30, desayunar y reunirnos con Tetaro para acompañar un ratín al cachondo éste y comprobar que sale de una vez de Ourense, que nos jalea y alborota el gallinero.




Parte II. La partida de Ourense


A las 8:30 o'clock estabamos en el mirador al lado del Albergue. Bajamos hasta la cafeteria, desayunamos y a la hora acordada apareció Tetaro, que había quedado con dos amigos más en el Puente Romano.


Iniciamos y nos encontramos no con los otros dos, sino con cuatro más, el joven Adrián, Cantón, Toby y Rubén, más tarde se uniría otro más al grupo.

El amigo Mambru, rapidamente se fijo en nuestras monturas dobles, y la baba le caía levemente por la comisura de sus labios.

Como todo el mundo sabe, la salida de Ourense es tormentosa con rampones del 20% y luego se vuelve en un falso llano del 12-15%. Caminos empedrados, camino real, asfalto, losas de piedra muy divertidas. Mambrú se portó como un campeón, exprimiendo de su cuerpo hasta la última gota del picante que le echamos a las costillinas la noche anterior. Subió dignamente, más bien subió con nota, entre comentario y comentario y entre risa y risa, mientras Tetaro iba cantando el porcentaje de pendiente, "15%, 17%, 20%".



Juan no se lo creía, de hecho a media mañana preguntó si los porcentajes cantados eran broma, y la verdad es que no, eran reales. Ya arriba en Sartedigos, se sigue subiendo pero de forma más suave, alternando con alguna bajada.










Creo que Mambru se lo estaba pasando en grande, comentando sobre los diferentes pueblines, la bajada al rio Barbantiño, con su puente medieval. La subida empedrada toda rota en Faramontaos. Buena conversación de nuestro amigo, departiendo y riendo con todos. Así llegamos a Cea, buscamos su albergue para sellar, no estaba el hospitalero ni el sello, así que selló en un bar de al lado.





















Continuamos pasando por su plaza con la Torre del Reloj, y seguimos hacia Oseira. A partir de ahora viene un tramo precioso y de firme muy divertido hasta Silvaboa. Comienza con un camino pistero con pendiente para convertirse en un camino con enlosados anternando con la pista y una calzada medieval algo rota, para acabar nuevamente con enlosados. Facilmente realizable con alforjas, salvo en un punto muy concreto.


Mambrú se desquitó en este tramo del camino roto de Faramontaos, quedando muy orgulloso, y con las babas claramente cayendo por su boca viendo cómo subiamos nosotros con las dobles de una manera facil y con buena tracción.


Ya en Silvaboa el camino entronca con una carreterilla que lleva al Monasterio, seguimos un poco con él y 1 km. más arriba nos toca despedirnos de nuestro amigo. En particular, nos emplazamos hasta dentro de 15 días en Granada, indicandole que seguro él, despues de hoy, iría con nueva montura, y "pues no te creas que no" respondió.

Una ultima recomendación: "repón energía en Oseira y descansa un rato".




Despues de despedirnos y comprobar que había salido bien de Ourense, él continuó su Camino hacia Santiago y Muxía, y nosotros regresamos por un camino alternativo hasta Silvaboa, no sin antes girar mi cabeza observando cómo se alejaba Juan, ya solo.

Nuestro regreso, ya no interesa mucho, se hizo por la otra variante, la de la Costiña de Canedo, esa subida de asfalto de 2-3 km. que tan bien conoce Rafa. En ella alcanzamos descendiendo los 74 km/h y eso que iba frenando ligeramente para no coger más velocidad. Ahora entiendo un poco más, pero solo un poquillo, la Teoría de la Relatividad de Albert.


SALud




PD 1: a esta hora ya me llamo indicando que está en Silleda y que va molido. Se acordó de la recomendación en Oseira y la cumplió "vaya subida hay despues del Monasterio!!!!!, menos mal que te hice caso."

PD 2: Después de estar esta jornada con el amigo Mambru, a veces tengo la sensación que el objetivo de su travesía es, simplemente, comer las pipas en Muxía con el mar como compañero.


Resto de las Fotos en Picasa: Via de la Plata con Mambrú