lunes, 21 de julio de 2008

Entrenamiento para Mi Destierro

Al igual que el domingo pasado y el anterior, las salidas largas, con los amigos, en torno a los 50-60km. y por trazado rompepiernas me sirven de entrenamiento para mi próxima aventura: La Ruta del Destierro del Cid.

Si bien este domingo tocaba ruta solitaria, el motivo fue una macro-comida familiar en la parroquia de Pexegueiro, perteneciente a Tui. Aunque una vez llegado a casa leo que Luis, de foromtb, quería acompañarme en una parte del trazado, una pena de no leerlo antes, porque los sacrificios compartidos se llevan mejor.

Así con ayuda de mis amigos habituales -compegps, sigpac y googlearth- me tracé una ruta para el GPS que me llevase hasta el mismísimo lugar del evento.

El trabajo de estudio podía ser titánico, pero aprovechando los tracks de rutas que ya he realizado, así como otros encontrados en wiki decidí hacer la, por mí denominada, Ruta de las 4 Rosas: de Nigrán coronar la primera rosa (Monte Castelo), seguir hasta la segunda rosa (Monte Alba) y continuar coronando las otras dos rosas (Galiñeiro y Monte Aloia), para hacer un descenso de 12 km. hasta Pexegueiro. Total unso 50 km. de "ná", en una mañana es muy factible hacerlo.

Todo controlado, en principio... La unica pega interna fue la querer convertir una ruta de bajada por donde mis amigos Full Toxo de foromtb.com descienden en subida... en las inmediaciones del Monte Alba. Sólo a mi se me ocurre, si la bajan será por algo...

Ese control inicial en papel, se fue degradando desde antes de iniciar la propia ruta: una cena en casa me mi hermano el día anterior que se prolongó más de lo deseado, un calor sofocante que impidió un descanso reparador la noche anterior...

Así, con estos antecedentes, el horario previsto de inicio (entre 8:00-8:30) fue incumplido: salí a las 9:15 h. Además para evitar en exceso carreteras principales, fui realizando la traza por carreterillas locales, pero el Sigpac no está actualizado desde hace 2 años, así tuve que regresar sobre mis pasos, haciendo 2 km. a mayores y retrasándome aún más.

Encaro hacia Monte Castelo, yendo por la carretera de Camos hacia Zamanes y despues de 5 km., en un cruce con una indicación hacia su mirador, giro a la izquierda, tomando otra carreterilla local. Se torna pista hasta el merendero del Monte Castelo y con mucha pendiente (ya no me acordaba). La subida ha sido buena. Hago unas fotos y prosigo sin mucha dilación.

El calor empieza a hacer acto de presencia. Subo un poco más, cruzo la autovía, me clavo un zarzal en todo el brazo que me frena en seco, y saco unos 10 pinchos, uno a uno, además de ver como la piel estaba desgarrada. Buenooo, "gajes" del oficio.

Sigo y comienzo a bajar antes de encarar la siguiente Rosa, el Alba. Por aquí es donde no tenía que haber subido, una subidón de la re-leche con unas piedras que ni quiero recordarlas... Empujing que te crió...







Rodee una primera loma, para descender a la carretera y subir por fín, el Monte Alba. La pista de ascenso es un auténtico basurero... Llena de azulejos y ladrillos rotos, así como infinidad de cristales tambien rotos. La pasé con mucho cuidado, pero con gran temor a pinchazo de los gordos.

Arriba los caballos y ganado bovino pacian a sus anchas por el merendero. Los humanos entretenidos entre las piruetas de la "patrulla alfa", los reactores del ejercito del aire de exhibición. Me detuve un rato para descansar algo y respotar unas ciruelas maduras.



















A las 12:00 reanudé la marcha por una buena bajada, si bien la de salida del Alba muy peligrosa por la pendiente y las piedras, que casi rasgo la cubierta trasera.

Hay zonas que ya conozco de mi salida con los Full Toxos del domingo pasado. Llego hasta la presa de Zamanes y ahí veo que la rueda trasera está casi en el suelo. Reparo con gran alivio de ver que el liquido sella el orificio, si bien con dificltad. Esperemos que no me de otro susto.

Desde Zamanes tiro por monte arriba con dificultad que el calor excesivo y los km. ya recorridos me desgastan en más que la justa medida, no sin antes hacer unas fotos en el precioso molino al ladito de la presa. Algún tramo de empujing, pero se va haciendo poco a poco, en medio de un bosque de eucaliptos. Sombra, sí!!! pero los condenados desprenden un caloooor... Veo que el tiempo se me echa encima...


















Llego al area recreativa de Galiñeiro, un poco más abajo de la casa forestal, y descanso un poco mientras reposto con un plátano y medio "toblerone", hay que dejar el otro medio para encarar el Aloia. Un grupo de 4 bikers estaban tambien descansando un poco más alejados de la fuente, así que no hice intención de acercamiento, más que nada por el escaso tiempo que me quedaba y aun faltaba la mitad de la travesía.

Continuo un tramo por carretera para enlazar el track
que supuestamente viene de la casa forestal. A partir de aquí sólo hay que seguir las marcas de la ruta de senderismo, en un constante sube-baja, con tendencia a subir.

El trazado, como es lógico no sube al Galiñeiro, porque es un pedregal absoluto, y se pasa entre este pico y el Arruidos, que tiene una caseta de vigilancia. Se podría subir, pero no es intención de este narrador probar los golpes de calor.

En un momento dado, la traza se hace impracticable para el ejercicio del MTB y tengo que hacer empujing, llegando a un cruce de carreteras, a los pies del Monte Aloia.

Son las 14:15 h. y solo me queda coronar la última "rosa" y 15 km. para mi destino. La hora me "come", pero ya puestos...

El sol, en todo lo alto del cielo, es implacable. Se nota su "abrazo" en piernas, brazos y cabeza... Paro a la sombra a decidir si tiro un rato por carretera sin coronar el Aloia para llegar al evento en tiempo prudente o por el contrario sigo por la pista de senderismo por otra buena petada...

En esto, un coche se detiene un poco más arriba del cruce y sale una pareja de edad avanzada y se poner a caminar carretera arriba. Yo sigo en mi meditación, pero me extraña la hora y el sitio del coche aparcado. Vuelvo a mis decisiones, avanzo un poco. Me detengo mirando una vez a la "petada", otra a la carretera, a la petada, a la carretera,...

La mujer vuelve al coche y rebusca algo en el maletero, me acerco con intención de preguntar sobre el destino de la carretera y me contesta que al Aloia, pero que está muy nerviosa porque su marido se encontró mal, se mareaba, llamó a su hija que es enfermera y le recomendó que se acostase. Dirijo mi mirada hacia él, y le veo sentado en una piedra al sol lapidatorio.

Me voy rapidamente a su lado, para llevarlo a una sombra placentera, cosa a la que accede, le preparo un pedrolo a modo de banco a la sombra de un penedo. Le recomiendo llamar al 061, pero ella no lo considera oportuno, ya que está asesorada por su hija ¿? Aprovecho para repostar con el último plátano y la otra mitad del toblerone.

Le doy charleta, hablamos de topografía, de El Calvario, y de muchas cosas más, sus dos infartos, su derrame cerebral por la caida de un objeto de 16 kg. en su cabeza, "pues tiene suerte de contarlo", le respondía.

Me entretuve un buen rato con ellos. No podía dejarlos allí -en medio de la nada-, hasta no ver que mejoraba. Ya con mejor aspecto, decidieron seguir hasta el restaurante del Aloia para comer, arrancaron el coche, siguiendo mi recomendación d epone el aire acondicionado un rato antes de subir.

Nos despedimos y seguí en bici hasta el merendero del Aloia. Mucha peña come de picnic en este sitio. Llené la camelback, me refresqué, respiré de su sombra y proseguí mi camino.

Unos metros más allá estaba la misma pareja, otra vez el señor mal, pero con algo de peor aspecto, ya no tenía gana de hablar y había accedido a tumbarse un rato, desistiendo de subir al restaurante. Otra vez estuve un ratillo con ellos, para buscarle un lugar adecuado y a la fresca para su descanso. Y como había mucha gente allí, les dejé indicandoles que si necesitaban algo que lo dijera a cualquiera que etaba allí comiendo.

Por lo menos, a ver si llegaba al postre, y la familia no me ponía mala cara por el excesivo retraso. De hecho mi mujer ya me había llamdo 2 veces, y mi padre otra más...

A partir de quí la traza se hace practicamente por pista forestal en descenso, 12 km. hasta la puerta de casa. Buena bajada, con mucho polvo, entre eucaliptos y casi ciego: las gafas estaban tan sucias de las gotas de sudor, que casi me impedia y lo que tiene el no conocer es no hacer caso al GPS, y tirar por cruce distinto, que en nada ya has bajados 400 metros y tienes que volver a subir.

El amigo GARMIN me llevó como siempre que lo he precisado al sitio donde quería ir, con una diferencia de 200 metros escasos. Gracias fiel compañero de fatigas.

Al entrar en la casa, a las 16:05 sobre 40 convidados aplauden, no se si con sorna o con alegría. Vamos a dejarlo aquí, pero casi me cuesta los bonobicis de aquí hasta octubre, así como mi Camino del Destierro de Agosto.

Resumen de la jornada:



Distancia: 49,1 km según cuenta-kilómetros y 47,8 km. según el GPS
Tiempo pedaleando: 4:08:41
Velocidad media: 11,84 km/h
Velocidad máxima: 53,32 km/h
Ascensión acumulada:
. según unidad GPS 1.290 m.,
. según TC 1.467 m.,
. según CompeGPS 1.233 m.
Consumo de agua: 4,5 litros mínimo

Buena ruta, y por el firme, sustituía el Monte Alba por el de al lado, el de la ermita, que tiene buenas vistas sobre la Bahia de Vigo. Por cierto he de cambiar el nombre de la ruta por Ruta de las 4 Espinas.

Saludos y hasta otra.

martes, 8 de julio de 2008

A las Pozas de Mougás

Este domingo quedé con los amigos del foro de Vigo, los FULL TOXOS, para hacer una rutilla por Baiona, Mougás y Oia, que me sirve de preparación para mi Destierro del Cid. Reproduzco lo posteado en foromtb:

A las Pozas de Mougás

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Bueno, bueno, bueno....

Joer con las bajasdas trialeras: si tengo el cuello hecho un asco... por qué sitios me llevais...



Despues de salir del punto de encuentro unos cuantos Toxos y otros allegados y amigos, subimos hacia la colegio de Ramallosa por asfalto, donde nos encontramos con Arturo. La subida hasta ahí ya tiene una buena pendiente, pero al ser por santo asfalto, pues se lleva bien, excepto Antonio que estaba peleado con su Talas... Despues una vez en tierra creo que ya disfrutó más.




El ritmo lo marcaron los dos pro-hombres del grupo, que creo que tienen una relación "muy especial"... Una vez arrancado desde el colegio una pista en continuo ascenso con un buen par de petadiñas, sobre todo la última, pero se superó bien, si bien el bombeo cardíaco pasó alguna dificultad.

El secreto: ir en plato mediano y no poner el pequeño hasta la ultimísima parte, porque si inicio con el pequeño, despues en la gran petada me quedo sin desarrollos, sin fuelle, sin aire, sin sangre, sin...







Despues bajada-llaneo majo. Y como ya empiezo a conocer las debilidades de la peña, realizo un pequeño ataque haciendo un interior demoledor a Maf, y como estabamos en la vispera de San Fermín, acudió a trapo, siguiendome "ipso facto". Todo previsto, ajajajaj. Yo tambien te quiero Maf.

El día estaba inicialmente un poco pocho con mucho fresco, por lo que ves de ir directamente a las Pozas, la ruta se alargó un poco hacia el sur, más allá del Monasterio de Oia.

Regresamos nuevamente por unas bajadas trialera donde puso a prueba nuestros frenos, pericia, y en mi caso, la fortelaza de los musculos del cuello (y tengo que decir que los tengo al mismo nivel que los pollos, sólo sirven para picotear...). Y en una mala trazada, dedicí detenerme para no acabar con los huesos en el suelo.

Así de este modo aproveché para tirar algunas fotos, del Monasterio incluido. Reinicié, ya en cola de pelotón yendo por pistas hasta que en un momento dado, algunos bikers decidieron regresar por carretera, por la hora que era. El resto fuimos hacia las Pozas.

Un poco de investigación, rascándonos con las silvas, y alguna que otra perdida, al final llegamos a las Pozas, y por supuesto , tuvimos que ir a la más grande (la que está más arriba). Sólo dos superhombres se bañaron (Arturo y Abel).

El agua, helada cayendo en cascada desde la montaña, destilaba una pureza sin igual, hasta que se metieron ellos. Pero con dos coh...es, fueron los únicos valientes, mientras el resto los observabamos, no se si con envidia o diciendo "estos dos chalados...".

La idea inicial era que despues del baño, subieramos las petaZ's, pero dada la hora, el baño fue breve y decidimos regresar sin subirlas, salvo Abel, Emilio y Miguel Angel, que están que se salen -y ademas no les eperaba nadie para yantar, que si no ibamos todos-. Así se explica la foto del pulpo, cabroncetes.

Retornamos por carretera dando cera, y como me cuesta ir por asfalto... DIOS!!! Al final me salieron de casa a casa, sobre 61 km. con un ascenso acumulado de 1.061 metros.

Saludos y hasta otra...












Más fotos en foromtb.com