Esta debería ser la primera entrada del Blog, después de una presentación, ya que con este viaje se inician todas mis rutas de travesía desde el año 2006.
ANTECEDENTES
Corría el año 2005 cuando, yendo a una reunión de empresa en el coche de mi compañero de trabajo y fatigas de bicicleta, Javier, me comenta que va a realizar el Camino de Santiago junto con otros tres amigos. En ese momento recorrió dentro de mi una luz, no interior ni mística, sino porque llevaba tiempo con esta idea en mi cabeza, sin desarrollarla y ésta era la oportunidad que tenía para llevarla a cabo. Así que decidí acompañarlos en ese momento.
Breve resumen en la primera entrada del Blog: Esto es el principio.
FILOSOFIA
La idea era ir cinco personas con un coche de apoyo sin alforjas, cuatro permanentemente en bici y otro en el turismo de forma continuada llevando el equipaje y controlando la logística, a la vez que haría turismo por las localidades del y cercanas al Camino de Santiago.
Al ir con coche de apoyo y sin alforjas, el alojamiento sería en hoteles, hostales, casas de turismo rural,... Todo previamente cerrado y contratado para no llevar sustos, ya que el viaje se haría en la primera quincena de agosto de 2006.
Mi motivación inicial para la realización de este viaje era puramente deportiva y superación personal, hay que darse cuenta que era la primera vez que haría un viaje de estas características y que había comenzado a rodar por todo tipo de caminos (pistas, senderos, trialeras,..) de forma frecuente desde hacía bien poco. Antes rodaba sólo en verano y por terreno mixto y de escaso valor: asfalto y pista forestal.
Con esta idea, me había propuesto llevar a rajatabla dos intenciones:
1) Seguir fielmente por el trazado de la senda de los caminantes, con el mínimo asfalto posible, salvo coincidencia con aquel.
2) No poner el pie a tierra por duro que fuese el tramo, salvo que peligrase mi integridad física o por imposibilidad física en tramos no ciclables.
PROTAGONISTAS
Tres amigos y un acoplado, a saber:
* Alfonso de Santiago de Compostela: sería la persona encargada de conducir el coche mientras el resto pedaleábamos y sin intención alguna de poner el pie en el pedal bajo ningún concepto. Además iría cargado con una magnífica cámara de fotos y una videocámara.
* Antonio de Sevilla: posiblemente el más fuerte de todos, y no solo por su complexión, sino por sus salidas frecuentes con la bicicleta de carretera. Le gustaba poco las trialeras, su terreno favorito aparte del asfalto eran los caminos limpios de tierra dura. Curiosamente es cuñado de un vecino, así que lo conocí en las Navidades del 2005.
* Jose de Madrid: también compañero de trabajo y padrino de la hija de Javier. La Trek doble la había comprado pocos días antes de iniciar el viaje, sin entrenamiento y con mucha voluntad. El coche de apoyo sería el suyo.
* Javier de Ourense: ya he comentado sobre él, tanto en esta entrada como en la primera del Blog.
* Ignacio de Ourense: el que suscribe y acoplado. Como yo tenía porta-bicis para toda mi familia, me ofrecí a llevarlos así como las barras del coche y las herramientas para las bicis. Tuve que comprar un accesorio para adaptar la base de las barras al coche de Jose pero sin problema alguno.
ETAPAS
Las etapas a seguir serían las mismas que las realizadas por nuestro amigo Ricardo, calcaríamos fielmente su ruta, a la vista de sus comentarios y recomendaciones, salvo en el tramo de Samos, que iríamos por San Xil y en los tres ultimos días, donde intentaríamos reducir el último en un intento de llegar a Santiago por la mañana, a costa de aumentar las dos anteriores. No nos parecía demasiado descabellado.
Etapa Prólogo: Aguiño - Ourense - Roncesvalles (169 km. hasta Ourense / 876 km. hasta Roncesvalles)
Etapa 1: 06/08 Roncesvalles - Puente La Reina (73 km. / 73 km.)
Etapa 2: 07/08 Puente La Reina - Viana (67 km. / 140 km.)
Etapa 3: 08/08 Viana - Santo Domingo de la Calzada (85 km. / 225 km.)
Etapa 4: 09/08 Santo Domingo de la Calzada - Burgos (77 km. / 302 km.)
Etapa 5: 10/08 Burgos - Carrión de los Condes (90 km. / 392 km.)
Etapa 6: 11/08 Carrión de los Condes - León (102 km. / 494 km.)
Etapa 7: 12/08 León - Rabanal del Camino (73 km. / 567 km.)
Etapa 8: 13/08 Rabanal del Camino - Trabadelo (70 km. / 637 km.)
Etapa 9: 14/08 Trabadelo - Sarria (59 km. / 696 km.)
Etapa 10: 15/08 Sarria - Arzua (78 km. / 774 km.)
Etapa 11: 16/08 Arzua - Santiago (42 km. / 816 km.)
MEDIOS
Bicicleta: BH Jumper 760 de aluminio 7005, rígida con una horquilla Suntour de muelle interno con 80 mm de recorrido (incluso menos). Frenos V-Brake y cambios Shimano muy normalitos, que iban muy bien. No llevaba pedales automáticos.
GPS: Garmin Edge 305, claramente de entrenamiento, sin posibilidad de mapas, ni almacenamiento masivo en tarjeta SD. Como lo había comprado hacía muy poco, intenté cargar los tracks pero me dio error por estar defectuosos. Así que nunca lo utilicé como navegador, sino como velocímetro.
Como complemento llevaba una PDA con el TOMTOM y el Compepocket y mapas raster descargados del SigPac. El TomTom lo usamos en el viaje de ida, casi al final para llegar a Roncesvalles en coche. El CompePockect lo usé en Pamplona, despues de desviarnos pero como los tracks estaban defectuosos, guardé la PDA en la mochila y no volvió a salir de ella hasta llegar a casa.
DOCUMENTACIÓN
Escasa por mi parte en cuanto a guías oficiales, pero bien documentada gracias a las numerosas lecturas de experiencias de otros bikergrinos, peregrinos y webs especializadas, así como al magnífico cuaderno de bitácora de Ricardo y su relato del Camino de Santiago, donde da detalle de cada monumento que hay a lo largo de la travesía. Impreso solo llevé el aporte de Ricardo, mientras que Alfonso llevaba una guía del Camino, no recuerdo si era la de Anton Pombo o la de la editorial Everest. Lo que si mencionó varias veces es la fidelidad y detalle de hitos, algunos de interés y otros no tanto, que aparecían en el relato de Ricardo, incluso se sorprendía por detallar cosas que no aparecían en su guía.
05/08/2006 - ETAPA PROLOGO: El viaje de ida a Roncesvalles.
Como el coche de Jose se averió en su desplazamiento desde Madrid a Aguiño, tuvimos que sustituirlo por el de Javier, más ancho grande y cómodo para cinco pasajeros que el inicial, aunque tampoco estaba en óptimas condiciones.
Javier fue a buscar al resto de integrantes a Aguiño ya con las barras puestas en su coche (menos mal que los adaptadores también valían). Sus familias permanecerían en esa localidad costera de la provincia de La Coruña disfrutando de sus playas.
Sobre las 3:30h de la mañana de ese martes llegaban a mi casa el resto de los integrantes de la expedición, donde instalamos los porta-bicis de las tres bicicletas que estaban concentradas en mi bodega aguardando este día.
Una vez montado e instalado todo, mis dos mochilas (una de viaje y otra para la travesía) y mi caja de herramientas y repuestos para posibles averías y destrozos. Estupor al comprobar la cantidad de equipaje que llevaban mis compinches, pero bueno,... al llevar coche de apoyo da igual el volumen y peso del equipaje.
Arrancamos y a la altura de La Gudiña nos detenemos para tomar un refrigerio, toda vez que los compañeros llevan desde mucho antes que yo despiertos. Continuamos y vamos charlando y dormitando, a la vez que nos relevamos en la conducción. El último tramo me tocó a mi el arte de la conducción y, como había dicho Javier, comprobé que no estaba en optimas condiciones: tenía falta de fuerza, como si el turbo del coche no funcionase. La cuestión es que nos llevase a destino y que aguantase todo el viaje de vuelta, ya que tenía pensado llevarlo al concesionario oficial.
Sobre la hora de comer llegamos a Roncesvalles y despues de alojarnos en su hostal y contemplar la Colegiata y los hitos sobre el Camino y ayudar a un biciperegrino catalán atascado en el montaje de su bici, nos desplazamos a Saint Jean Pied de Port, otro de los lugares emblemáticos, junto con Roncesvalles, para iniciar el Camino de Santiago.
Tan solo veinticinco kilómetros de sinuosa carretera separa Saint Jean de Roncesvalles (17 km. en linea recta), en ella hay que pasar de una altitud de 100 metros de Saint Jean hasta los 950 metros de Roncesvalles, sorteando en medio el paso natural de Ibañeta con una altitud de 1.050 metros.
Cuando uno inicia su travesía en Saint Jean, la primera etapa acaba precisamente en Roncesvalles, dado la verticalidad de sus caminos, así como la dureza por la altitud acumulada que se tiene que sortear. Hay dos opciones, hacerlo por carretera, más tendida y larga y otra, para los más osados, por la senda original, de menos distancia y por tanto de mayor dureza. Toda una etapa reina para empezar, aunque nosotros ya habíamos decidido iniciar el Roncesvalles.
En Saint Jean visitamos la villa y subimos a su fortaleza, paseamos por sus bulliciosas calles, cuyos negocios están volcados al turismo santiagueño, observamos la ribera del rio Nive y puentes, así como su construcción típica coincidente con las villas españolas al otro lado de la frontera.
De regreso a Roncesvalles, comprobamos nuevamente la pendiente hasta Ibañeta, donde nos detuvimos para contemplar el monumento a Roldán. A esa altitud en plenos Pirineos siendo las siete de la tarde de un día de agosto ya se nota, ya, el frio mientras nosotros estábamos en manga corta. Nuevamente en España, asistimos a la Misa del Peregrino en la Colegiata de Santa María de Roncesvalles.
Después buscamos un lugar para cenar y nos fuimos a descansar, no sin antes comentar la jugada del día siguiente.
domingo, 18 de marzo de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario