Etapa Alhama de Aragón - Daroca

Tomada ayer la decisión de pasar un ratillo en el lago termal de Alhama, me levanto más tarde, desayuno en el hotel y me dirijo a las 10:15 al lago. El horario de apertura son las 10 de la mañana. Hora muy temprana para el cliente tipo de un hotel balneario, pero no para mi; que por cierto, es precioso.




Antes de ir al lago estuve charlando con el amigo ciclista alojado en el hotel, se llama Juan Climent de Barcelona, y tiene un almacen de librería. Después de un rato hablando, no me recomienda ir por camino, ya que la senda se pierde. Me despedí y fui al lago.

Está vacío, solo hay pocas personas sentadas en las tumbonas. Hagos unas fotos y me cambio rápido y entro en el agua despacio, sin hacer ruido.








El agua está estupenda a 32 grados y una profundidad entre 1,5 y 2,5 metros, para un baño bien, pero yo además estaba buscando algo bien distinto: la relajación y distensión muscular a base de agua bien caliente.

Vamos que ésto no son las Termas de Ourense!!!! Nosotros tenemos el agua a 38-45 grados y con escasa profundidad para estar descansando dentro del agua, tipo baños japoneses. Pero bueno a falta de Ourense, esto es estupendo.


Una vez acabado el baño, regreso al hotel, me cambio, pago la factura y recojo a la compañera, que ya me echaba en falta. Compro unos plátanos y jamón y repaso las notas y efectivamente, la senda se pierde y además recomienda en varios tramos ir por carretera.

Son las 11:32h cuando comienzo a dar pedales hoy, pero salgo del pueblo casi a las 12 buscando un lugar donde comprar provisiones, y siguiendo los consejos de Juan o Joan, tiro por carretera con la intención de llegar a Ateca, recuperando el tiempo perdido. La tendencia es a bajar, por lo que los km avanzan rápidamente. Antes de llegar a Ateca, paso por Bubierca con una magnífica iglesia en lo alto.





Sigo mi viaje por asfalto y un ciclista de carretera se me pone a mi vera y charlamos un rato. Es José Luis Molina, y dada mi preocupación, ahora por las pastillas de freno, me informa de una buena tienda en Calatayud. Es la tercera vez que me la citan y desde hace ya días, y desde Ateca son 15 km. Vamos para allá, y el bueno de José Luis decide acompañarme, va a mi ritmo, que salió solo para estirar las piernas.

Al ir acompañado se mete todo el hierro y se da más caña. Yo venga a dar pedales y José Luis tranquilito y relajado con su bici de carretera. La conversación se centró en ciclismo, el Cid y fotografía, además de irme informando de cuestiones cidianas como el castillo, que ya no existe, y batalla de Alcocer muy próximas del punto donde nos encontrabamos.






Llegamos a Calatayud, hasta la misma puerta de la tienda, y nos despedimos, no sin antes intercambiarnos nuestros email, y agradeciéndole su compañía y favor.

Una vez compradas las pastillas de freno, recorro las calles de la villa y en una plaza muy concurrida me dispongo a yantar liviano, acabando con un plátano y de postre un tipo phoskito o como se diga.

No estaba solo, todo el rato una mujer solitaria de riguroso luto en el banco de enfrente, qué solo saludaba a algunos vecinos, incluso le dieron el pésame. Al cabo de media hora llegó otra mujer mayor y con acento maño, y no pararon de hablar, atropellandose entre ellas y tocando todos los temas posibles, menos política.

Yo, mientras repasaba mis notas, dejo lista la bici, ordeno mis ideas y escribo la crónica de la jornada hasta ese momento, oía y escribía, como un serial de la radio. Conversación muy amena.

Se van, cada una en una dirección, y yo decido tampien partir, callejeando un poco más. Como al acercarme a Calatayud, había roto por completo la ruta de hoy, la idea era ir a Daroca, primero por carretera hasta Fuentes de Jiloca y luego ir al encuentro de la traza por una carretera que la cruza hasta Alarba. Y si veo que es muy tarde, sigo todo por carretera.

Salgo sobre las cuatro, después de callejear y paso veloz por Paracuellos de Jiloca, Maluenda y Velilla de Jiloca. Se circula en medio de fincas con frutales, cae una pera limonera muy jugosa, después una manzana reineta, y no sigo porque vi unas ciruelas negras, pero de estas ya no piqué.

En Maluenda hay unos restos de un castillo y posee una plaza soportalada, donde descansé tomando liquido elemento.

Continuo mi destierro y llego a Fuentes de Jiloca, me llama la atención su torre de la iglesia mudéjar de colores. Para verla de cerca hay que subir un cuestón, además en esa dirección está la Fuente del Sapo. Pues a subir toca y ya ni me esfuerzo: paso de altitud 647 a 705 m y en el mismo pueblo. Parece Villarriba y Villabajo. Fotos a la iglesia y sigo subiendo a localizar la fuente. Pero no aparece por ninguna parte, así que desciendo rápido el bajadón.

Como la idea era ir buscar el trazado desde este pueblo, analizo la situación y buscar la traza supone descender y después subir unas petadas por montaña, y como hoy estoy vago, decido seguir por asfalto. Total...

Prosigo pues y en Montón dejo el suave ascenso por la vega del Jiloca para encarar el puerto de Villafeliche. Subo a ritmín como dicen mis colegas bikers leoneses, y hago un alto en el camino para tomar algo de fruta (comprada).

Sigo y llego al puerto a una altitud de 870 m. Después se llanea, otro repechin hasta los 890 m y por fin bajar a Daroca, donde tienen estupendos jamones a secar al lado de la carretera, a modo de reclamo comercial. Según desciendo ya se contempla la torre de su Castillo Mayor.














Entro en Daroca por una calle empredrada despacio haciendo fotos y cuando me detengo junto a un vecino para preguntar por la calle del hotel, la conversación se hizo tan fluida que incluso me sugirió acercarme en ese momento a la Colegiata y ver la Capilla de los Santos Corporales, me acompañó pues iba a los oficios y me sirvió de perfecto guía dentro de la Colegiata, explicandome cada detalle.

Hablaba con la autoridad y sapiencia de una persona versada. Y casi con emoción, ya que este hombre de casi 80 años , se bautizó en la pila que me estaba mostrando y se casó hace 50 años en la misma Capilla de los Santos Corporales. No solo eso, sino que también me indicó donde estaba la Puerta Baja, las murallas y me habló con orgullo de su familia.

El nombre de este personaje es Aurelio Bello López, de profesión sastre, sí sastre, no jubilado, porque hay personas que nunca se jubilan, siguen activos. De hecho es el presidente del Casino.

No hice fotos dentro de la Colegiata por el respeto debido a las personas que estaban en el Rosario, si bien al salir estuve lanzando algunas fotos a esta sorprendente villa.
















Alojamiento en Posada del Almudí. Perfecto, Miguel Ángel cada día se supera más. Cena ligera con pasta y pescado en los Cien Balcones.








La jornada de hoy ha sido de alrededor de 70 km., muy parecido a lo inicialmente previsto. Mañana toca otra jornada matadora de 108 km teóricos hasta Molina de Aragón, con tendencia a subir hasta Pozuelo del Campo y a partir de ahí, se desmadra la cosa.

Salud y hasta mañana.

Gracias a todos por los comentarios, en concreto:
. A mi familia, me ha echo mucha ilusión el comentario y casi me emociono en soledad.
. Nacho, cuenta conmigo para esa cena homenaje, siempre que haya bocata jamonero de segundo.
. José Luis Moreno, ya leí tu comentario y lo pusiste antes que te citase en el blog, gracias nuevamente y decir que me gustó mucho tu pueblo, tengo que volver con más tiempo; y sí, me trataron estupendamente en la tienda, como si cliente habitual fuera.