Etapa Medinaceli - Alhama de Aragón

Al estar de visita y además haberme acostado más tarde, decido levantarme tambien algo más tarde, pero no mucho. Así a las 8 ya estoy desayunando.

Me despido de Begoña, e inicio subiendo al Medinaceli antiguo. Según el Consorcio, una subida con fuerte desnivel, y sí, es muy curiosa, pero se puede subir estando descansado. Solo me detuve dos veces, una para hacer unas fotos y otra por una piedra qué me bloqueó la rueda.





Llego arriba justo a la carretera donde está su Ermita del Humilladero. Una vez arriba, entro por la puerta árabe contemplando la fortificación y accedo a su plaza Mayor por un callejón por el que casi no me entra la bike con las alforjas. Qué placer ver la plaza vacía. Toda para mi cámara de fotos.

Sigo rodando con gran deleite por sus calles vacías y doy con los mosaicos romanos. Después busqué el arco también romano. Una maravilla de triple arcada y pavoneandose sobre el valle del Jalón y el del valle de Salinas de Medinaceli, depresión por la que había llegado ayer a la villa, para que lo vean bien. Las vistas son impresionantes.


















Abandono esta villa monumental, con gran interés artístico, saliendo nuevamente por su puerta árabe y comienzo un descenso vertiginoso con algo de piedra. Una vez en el llano se pierde el camino y hay que ir 50 m campo a través, me sorprende que las notas del Consorcio mencionen "ciertas dificultades de trazado", cuando ya estoy acostumbrado a traducirlas en grandes dificultades, y realmente ésta no me lo pareció.

Llego a Lodares por una zona de graveras y contemplo su fuente de los tres caños, pues ¿qué quereis qué os diga? No le hice fotos.

 


El trazado hasta Lodares, en realidad da una vuelta evitando el asfalto, pero a partir de aquí hasta Somaen se discurre por carretera, por la NIIa, la "a" debe de antigua, por lo que no circula nadie más que yo. Es complicado llevar la traza por caminos, que los hay, por la inexistencia de pueblos para el avituallamiento de los senderistas. Sería una irresponsabilidad hacer una traza que no tenga infraestructura suficiente para los caminantes.

El trazado, a pesar de ser por carretera bien asfaltada y ancha, es espectacular yendo por la sinuosa garganta calcárea del río Jalón, todo el rato a mi derecha. Voy disfrutando un montón. Casi como que quiero ir despacio, haciendo fotos a diestro y siniestro.





















Cuando llego a Somaén, una torre de un castillo de origen árabe vigila desde lo alto, cruzo el Jalón por un puentín y comienzo la visita, perdiendome entre sus calles, no mucho porque tiene mucha pendiente y muchos escalones, si bien es muy interesante con buenas estampas de arquitectura tradicional.
























De Somaén se sale por su Ermita de la Soledad siguiendo la traza cidiana que nos lleva, dejando esta vez el Jalón a nuestra izquierda, por caminos rurales de buen firme y en descenso hacia Arcos de Jalón.


 





Compruebo que Arcos ya es una población algo más grande y febril. Tiene los restos de una torre en lo alto, como último vestigio de un castillo. Se accede por un paseo levemente escalonado, con las estaciones de Semana Santa.

En la quinta me caí. Un escalón un poco más alto, hizo patinar la trasera y me quedé clavado. La bike se me fue hacia atrás y con el peso de las alforjas la pude controlar con un topetazo del manillar contra el muslo. Qué dolor. Subo y las vistas lo merecen.



















Voy al pueblo y pregunto a un guardia civil sobre una tienda de bicis curiosa y me informa que no hay y que el mismo, aficionado a la bici, compró compró la suya en Calatayud. Pues nada! A comprar fruta, pues!

Sigo hasta Aguilar de Montuenga por camino desobedeciendo las recomendaciones del Consorcio, que indican que para los ciclistas no merece la pena ir por camino. Tengo que contravenir al Consorcio y decir que sí merece la pena ir por la senda original. Una vez allí, le pregunto a un vecino por el castillo por despiste (es en siguiente pueblo) y él me pregunta si soy afilador.

Afilador? Tengo pinta de afilador? Soy de Orense y allí es la tierra de los afiladores, pero no, no soy afilador -le explicó. Al cabo de un rato prosigo después de despedirme, y al salir del pueblo ya se contempla el castillo por el que pregunté.


 





En Montuenga de Soria, donde están las ruinas del castillo con iglesia integrada, también en ruinas, se entra por su Ermita de la Soledad y se sale al lado de un torreón, que la verdad, a mi me pareció una muela con una caries profunda.





Llego por camino fácil sin apenas cuestas a las 13:30 a Santa María de Huerta, visitando su monasterio cisterciense por fuera, ya que hasta las cuatro no hay visitas. Yanto ligero, un bocata de lomo embuchado que me preparó Begoña y fruta y mientras descanso, escribo y envio la crónica de la etapa de ayer.

 











Salgo cerca de las cuatro, tras ver un tipo con intenciones poco claras, que me estaba dando la murga: que si tengo agua (ahí está la fuente, pienso), que no hay agua (que sí, sigo pensando), que si tengo vaso (no!!!, bebe como todo dios!!!!, con las manos...), que si tengo bidon, mientras mira insistentemente (que noooo!!!!, uy qué lío!!, ya me está tocando los eggs). Me pongo los guantes y el casco y me piro sin más explicaciones, cuando ya veo que se limpia las uñas con una micro-navaja (menos mal que no saqué mi navaja suiza).

La traza se digire hacia Monreal de Ariza al nordeste de Santa María, pero antes la traza me desvia hacia el sureste dando una gran vuelta para pasar por Torrehermosa, y contemplar su torre en ruinas y tambien se supone para pasar por delante de la ermita de San Pascual Bailón, importante hito de peregrinación religioso, pero no cidiano.

 


Sin embargo, la traza lejos de llevarnos directamente hacia la ermita, nos da otra vuelta en las inmediaciones de Torrehermosa, para entrar por la villa sin ver la ermita, cosas del Consorcio, porque yo creo que se podía ir más recto y pasar al lado de la misma.

 

Ya en Torrehermosa, además de su torreón, veo su iglesia dedicada también a San Pascual y su inmaculada plaza de Villareal. Se sale del pueblo hacia el norte por la Cañada de Torrehermosa.





Sigo, pues, hacia Monreal de Ariza yendo por el valle del arroyo de la Cañada, primero por la derecha, después por la izquierda (casi sin camino) y nuevamente por la derecha. Hay que analizar estos cambios con Sigpac o GoogleEarth, porque me da que es otra bobada más.








Se llega a Monreal de Ariza salvando el Cerro de Bubillo, con buenas vistas del pueblo con su castillo e iglesia en ruinas. Se entra por la Alcórbriga y se sale por la Plaza Mayor.


 





Después de Monreal, siguiendo nuevamente por la vega del Jalón, llego a Ariza, pueblo por el que el track no pasa. Yo sí entro, rodando despacio por sus calles antiguas. Fotos a su iglesia con torre tipo mudéjar y a sus calles. A varios vecinos les pregunto por el barrio de la Juderia, pero nadie me sabe contestar, me imagino que era ese mismo por el que rodé. Sigo y me encuentro con la Puerta de la Villa. Más fotos. A otro vecino le pregunto por los restos de la calzada romana y tampoco me sabe decir.














Me voy del pueblo por donde llegué, ya que si ni los propios vecinos saben, porqué debería yo saber? Ya a punto de salir veo el puente medieval de origen romano, pero de la calzada, nada de nada.




Ahora la traza se aleja ligeramente de la vega, subiendo y bajando unos cerros, rodando por el camino de la Cañada de la Zarza. Adelanto, campo a través, a un tractor que ocupaba toda la senda y me imagino que su conductor quedaría alucinado.







Tras superar un último repecho, el collado de El Puntal del Cuerno, se desciende y llego a Cetina,. Allí pregunto por el palacio de Quevedo. "Por allí", me señalan unos jóvenes. Sigo sus indicaciones y efectivamente me encuentro con el castillo-palacio, hecho una pena. Le hago unas fotos con tristeza como si un descendiente de D. Francisco fuera, observando desolado de lo que fue a lo que es ahora.

Repasando mis apuntes con posterioridad, compruebo que era en realidad el Castillo-Palacio de los Liñán, donde se caso Quevedo con Dña. Esperanza López de Mendoza.












Tan solo quedan 8 km hasta el final de etapa por buen firme al borde de la vega. El Jalón sigue siendo el protagonista estando a mi izquierda. Alhama se encuentra situada entre dos collados por donde discurre el cauce del río siendo un lugar termal.







Llego a Alhama de Aragón, con alojamiento reservado por Miguel Angel en el Hotel Las Termas, con la idea de darme un bañito termal en su piscina natural, única en Europa. Así también relajaría mis cansados músculos. JOER!!!! Los baños acaban a las ocho y son y cuarto, NO PUEDE SER!!!





Una opcion es salir mañana tarde y disfrutar de un baño mañanero. Gestiono la dormida de mi compañera, que quede a buen recaudo con las de alquiler del propio hotel. El empleado me comenta que hay otro huésped con bicicleta propia y la deja allí también.

En esto, aparece y me lo presenta sin dar nombres. Ya es mayor, y está pasando sus vacaciones allí, además me cuenta que hizo todos los Caminos de Santiago en bike (francés, primitivo, vía de la plata, portugués, e inglés hasta Finisterre y Muxia). Charlamos un rato y no le pedí el nombre. A ver sí lo veo mañana.

Despues de alojarme en una macro-habitación con techos altísimos, propio de un típico antiguo Gran Hotel, me fui a callejear por la villa y luego a cenar en el hotel mientas escribo la cónica.

Me retiro a mis habitaciones para seguir ordenando mis ideas en la cabeza y aunque estoy cansado, tanto por la paliza que me estoy metiendo como por el calor soportado en estas tórridas tierras castellanas, me quedo escribiendo para publicar esta misma noche el relato. Algo ando retrasado con las publicaciones. Mañana no tengo pensado madrugar.

 





Ya vale por hoy. Solo mencionar que casi todo el trazado ha sido por caminos de buen firme prácticamente compactados o con poca gravilla, haciendo una rodadura veloz, sumando a que la tendencia de hoy es bajada y casi llaneo. El viento algunas veces en contra y la mayoría a favor, cambiando la tónica de días pasados.

Hasta mañana.