Etapa Sigüenza - Medinaceli SEGUNDA PARTE

Como se me fue en dedo al botón equivocado, pongo otra entrada para acabar la crónica de la etapa de ayer.

Decía que la dormida fue en casa de Begoña, prima de mi mujer. Pero antes tenía que recorrer los 35 km que me faltaban para llegar.

Después de la comida sigo sobre las cuatro de la tarde hacia Layna, antes paso a ver la Ermita de Ntra. Sra. de los Olmos. Retrocedo hasta tomar la senda correcta y mientras me alejo, a mi espalda se ve perfectamente Maranchón con la ermita.


 


Hasta Layna me separan 12 km pero malos, el track te lleva en ascenso por un camino en desuso que se pierde por veces, las indicaciones de los senderistas ayudan, pero es difícil y agotador seguirlo. Cuando, llegado a lo más alto, ya encontramos una buena pista, y ya parece que volvemos a mejorar el firme, ZAS!!!!, se vuelve a perder.









Tiro por un viejo camino, pero me va separando del track, no logro acercarme a él. El día que estaba amenazante de tormenta, empieza a despejar y el calor sofocante.

La situación ya me está tocando los eggs, dejo la biker abandonada, previa fijación de un waypoint en el gps (para no perderla) y me voy monte abajo en busca de la traza andando sin bici. Cuando llego a la ubicacion del track, veo que hay un camino bien majo. JOER!!!! Y ÉSTE DE DONDE SALIÓ!!! Estos chichos del Consorcio...

Vuelvo sobre mis pasos a recuperar a mi compañera, y como no podía ser de otra manera, allí estaba descansando tumbada en el mismo sitio donde la dejé.

Ya los dos juntos por el camino bueno rodamos en descenso hasta Layna, mientras dejo a mi derecha en un alto las ruinas de la ermita de San Ginés. En Layna me detengo a descansar y refrescarme en su fuente de tres caños.

 





Sigo por la vega del río Blanco hasta Urex de Medinaceli donde la traza gira a la izquierda para ascender por el Barranco del Val que nos dejará en lo alto de la depresión que forma el cauce del Arroyo Pradejón. Al fondo en línea recta está Medinaceli, la villa moderna está en el valle mientras que la parte antigua está en lo alto de un otero.


 





Despues de unas fotos, prosigo en una trepidante bajada en la que pongo a la burrica a 50 km/h. para descender al valle de Salinas de Medinaceli y rodar por la vega del Pradejón.

Una vez en la vega, se rueda de forma fácil hasta Arbujuelo y hasta el propio Salinas de Medinaceli, con sus famosas salinas, ahora destinadas al mantenimiento de las carreteras. Fotos varias y a seguir que falta nada.

 





 


En dos km llego al Medinaceli nuevo, después de cruzar el río Jalón. Llamo a Begoña y me dirijo a su casa, antes una fotillo de la parte vieja amurallada con su arco romano.








Aseo y salida a birrear y cenar un poco con un buen Ribera. Tengo que acabar el camino cuanto antes... Me duermo a las doce y media sin tener una sola letra de la crónica, por eso la escribo mientras descanso en la etapa siguiente.

Seguro que alguna cosilla no puse, como la belleza de los parajes, pero eso ya lo dejo como complemento futuro cuando incorpore fotos al blog.

Saludos y gracias a Begoña por su acogida y a todos los que me dais ánimos. Hasta hoy en Alhama de Aragón.